domingo, 19 de agosto de 2007

Robo

Ayer sábado por la noche fui a ver la película de Los Simpsons.
Novedoso film que se hizo desear más que el disco “Chenese Democracy” de los Guns and Roses, album que inclusive, según tengo entendido, aún no ha salido en venta al mercado, debido a varios motivos, entre ellos, que Axl Rose es un gordo papanatas y definitivamente perdió la voz.
Lo cierto es que Los Simpsons, llegaron a la pantalla grande, mucho más tarde de lo que debían, y obviamente, el éxito así, fue muchísimo más espectacular, a nivel monetario y comercial, que lo que hubiese sido hace 10 años atrás.
Sin embargo, sabemos las transformaciones que sufrió la serie, desde 1998 hasta hoy. Con el recambio de voces, escritores e incluso dibujantes, pasó de ser una serie televisiva y animada de humor ácido y sumamente original, a convertirse, en una serie directamente de humor muy pelotudo.
Muchos de los más fervientes fanáticos, han realizado tremendos esfuerzos, para ellos incluso poder creerse que la serie seguía manteniendo un buen nivel. La gran mayoría desertaron en ese propósito (me incluyo, aunque jamás consideré como buenas a las nuevas temporadas), y muy poquitos han respetado tanto su amor por Los Simpsons, que tomaron la triste decisión de “quererlos como son” y seguir apoyándolos.
Más allá de todo esto, malos o buenos, el comercialismo compulsivo de Matt Groening (el cual considero que es un terrible pancho) pudo más que el espíritu ácido de la serie.
Así es como hace más de un mes atrás se estrenó la película. He recibido, extrañamente, casi el 100% de comentarios positivos a cerca del film, lo cual me motivó a ir a verla.
Me generó expectativa, lograron que desespere por verla, confié en mucha gente, la vi, y luego la putee.
Creo que la película que he visto ayer por la noche, podría llegar a encajar justita dentro de lo que se calificaría como un “hurto” en el código penal argentino. Sinceramente me pareció una vergüenza.
Es la primera vez, que mucha gente logra, que vaya confiado y con buenas expectativas, a ver una película. Sin embargo, más allá de ello, me llevé una indigestión generada por el mal gusto y chistes sin sentido.
Lo único positivo que puedo encontrarle a una película tan mala, es, que no fue un capítulo largo de los Simpsons, realmente fue un largometraje, mas no dejó de ser un compacto de pelotudeces para entretener a la nueva afición que sigue a los antes gracioso Simpsons.
Contras?: Miles. Sería necesario abrir un nuevo blog, para comentar todos los errores de dicha película. Solo indicaré unos pocas.
- Chistes repetidos. Muchos de los chistes que se hacen en la película, ya fueron hechos en capítulos de los Simpsons, generalmente de las buenas temporadas. Puedo poner como ejemplo, una escena en la que Marg le habla a Homero, éste no le da pelota, y en la cabeza de él, aparece un mono frotando dos platillos de batería. Si, fue un chiste que ya hicieron, en lo único en que modificó, es en que en ésta ocasión, el mono frota dos platillos, no así como la anterior vez, en la cual había dos monos, pero dibujando numeritos en un pizarrón.
Otro chiste repetido, es uno que da inicio a la trama de la película. Homero lleva un cerdo como mascota a su casa, pero su presencia en la morada es sumamente reprendida por Marg. ¿Recuerdan aquel capítulo en dónde Homero lleva un mono cómo mascota a su casa, y Marg también lo reprueba?.
- Película corta y larga. Según me habían dicho, la película no era larga, tan solo duraba una hora y veinte minutos, y así fue. Sin embargo, fue tan pero tan aburrida, que resulta incluso larga. La trama es poco entretenida pero no confusa. He visto millones de capítulos malos de Los Simpsons, mas en ninguno de ellos he perdido la trama.
- Chistes cantados. Muchos de los chistes que se hacen en la película, si bien no fueron hechos en capítulos, eran sumamente “cantados”. Es decir, se podían adivinar fácilmente. En una escena, Bart es apresado por la policía. El Jefe Gorgory entra a una hamburguesería a tomar algo con sus dos oficiales, y dejan a Bart esposado en un poste de Luz. Luego aparece Nelson Rufino, el cual se le empieza a reir en la cara con el famoso “ja…jaaa”. No fue suficiente, que llegue a hacerlo 2 ocasiones más, para que uno pueda darse cuenta de antemano, que el chiste iba a ser “Nelson riéndose durante varias horas frente a Bart”. Paupérrimo. Y para colmo, creo que fue un chiste que ya habían hecho. Ojo, no son solo chistes cantados. También hubo situaciones cantadas, como ser, cuestiones que hacen al final de la película, las cuales uno puede adivinar que van a suceder. Algo que inclusive en los capítulos más malos de Los Simpsons no ocurría. Es de toda obviedad, que no puedo dar ejemplos, ya que si alguien lee este post, y aún no vio la película, no solo iría a verla con un panorama muy poco alentador de antemano, sino que también, tendría que soportar ver el film con el pésimo final ya sabido.
- La horrible voz de Homero. Muchos me habían dicho “No se puede creer, es increíble, pero encontraron la voz de Homero”. Mentira, sigue siendo la misma voz de pelotudo que le pusieron después del ’99. Lejos quedó la voz de idiota, estúpido e imbécil que le ponía Humberto Velez.

En fin, resumiendo, si no la vieron, pero no quieren perdérsela, les recomiendo que no se desesperen por poder llegar a “disfrutarla” antes de que la saquen de la taquilla, ya que no vale la pena. Si realmente quieren verla, pero no están desesperados, les recomiendo, con toda sinceridad, gástense los 16 mangos de cine en un Speed con Vodka y un Mojito (si les alcanza), que va a ser mucho más entretenido, que ver algo tan malo. Además, desde ya, les aclaro, esperen a que la pasen por Telefe en menos de 6 meses, un Sábado a las 22 Hs. Y finalmente, para aquellos que son fanáticos, pero que no fueron tan boludos como yo, de caer en suma expectativa y esperar algo bueno, por favor, resistan a la tentación y no la vean, es una súplica. Creo que, algunos de ustedes, pueden llegar a reaccionar mucho peor que yo y suicidarse al finalizar la película.
A los que indefectiblemente vayan a verla, que les sea leve.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

sos un pelotudo martin

Martín M. Padín dijo...

No, vos me ofendiste hijo de puta.